Jason Cohen, de a smart bear, toma las gráficas de flujo de caja de algunas startups en la nube y, en lugar de enfocarse en el “crecimiento explosivo”, se pregunta cómo serÃan esos primeros meses en los que ya lanzaste tu idea, estás quemando dinero y no has firmado ni un cliente.
Por experiencia propia, Jason nos cuenta que lo peor de todo es que no sabes si lo estás haciendo bien, hasta que lo logras:
El hecho de que estás con el agua al cuello, que no puedes animarte a continuar, que estás completamente a oscuras, que estás trabajando hasta matarte joven, que parece que das dos pasos hacia atrás por cada uno hacia adelante, que nada nunca es lo suficientemente bueno, que tus amigos y familia no pueden entender porqué estás retorciéndote sin progreso aparente, que tú mismo dudas si eres capaz de esto…
Estas cosas no quieren decir que estás fallando. Siempre es asÃ, hasta que deja de serlo.